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       Existen cosas que no se pueden comparar con nada, esas cosas que nos llenan el alma de emociones y nos florecen los sentimientos que se mantienen intactos, ninguna adversidad, circunstancia, momentos o personas podrán derribarlos. Cada uno tiene una base fundamental, una raíz que lo mantiene firme a cada cosa, una raíz que se alimenta del sentimiento que lleva todo el tronco, por lo que se ha forjado a lo largo de los años que lleva de vida, esa raíz en muchos casos es la familia, la base por la cual no se cae una construcción, una firme raíz que conforme se ha regado el árbol se mantendrá firme.         No todos pueden tener la misma calidad de raíz, pero conforme se crece cada uno puede alimentar esa base con lo mejor de sí, para bien o para mal, siempre será su raíz. En vientos fuertes esto mantiene firme, una base es fundamental para seguir de pie, en un árbol o en una construcción, pero, lo mismo sucede en las familias, si ésta...

     Si se analiza bien no es uno más, pero tampoco es uno menos; desde que alguien nace se empieza a contar el tiempo que va viviendo, por lo tanto cuando se le llama cumpleaños ya que es un año que ha vivido esa persona, así transcurre el tiempo y cada vez que esto ocurre se dice la cantidad que lleva vivida, no por vivir. Ahora bien, el festejo de ello no es necesario, ¿se han preguntado por qué debe alguien festejar o aplaudirle por haber cumplido otro año?.      Es tradición o cultura reunirse con los familiares o amigos para rendir honor a tal día, recibir elogios, detalles, regalos, aplausos y abrazos, más todas aquellas palabras hermosas, pero, ¿cuánto has dado por lo cual todo esto debas recibir?, no siempre se gana esa alegría en otros por haber cumplido otro año. En otro caso muchas personas felicitan tan solo por cortesía, hipocresía o porque sí, sin sentir aprecio mínimo; otros en cambio desbordarían emoción por hacerlo y lo transmiten en p...